La presentación de la exposición INFINITOS en palabras de su autor:

'Treinta años comisariando exposiciones, le dan a uno tablas en esto de la fotografía artística. Presentar la obra personal en una galería de tanto prestigio como Spectrum, da respeto y cierto grado de inquietud. En muy pocas ocasiones he tenido tiempo de ir rescatando mi obra personal, ya que seleccionar la obra de otros me parece un trabajo agotador, y en este caso, me viene ni que pintado el dicho: en casa del herrero cuchara de palo. Será por inseguridad, por miedo, por respeto, el caso es que ahí han estado durmiendo, hasta esta exposición en la galería Spectrum-Sotos.

En la actualidad trabajo el género del paisaje con una estética cercana a lo pictórico. Territorios naturales, atemporales, en los que sugiere la visión del espectador contemporáneo, bien ... introduciendo formas corpóreas o sugiriéndolas. Imágenes que forman parte de un laborioso desarrollo cultural, que proviene -al estilo clásico- de la observación de la naturaleza y la meditación necesaria para generar una obra; de la idea de que el ser humano necesita interpretar la naturaleza para poder entenderla.

Como posición ante la sencillez y la complejidad que definen la grandiosidad de la naturaleza, adopta una estética de perfección formal de carácter hiperrealista que trata de conjugar el binomio (sencillo-complejo). De la misma manera propone una pugna al espectador par a que olvide su complejo universo imaginario, forjado por la desbordante sociedad de la comunicación, y bucee en las imágenes de gran formato, como si de una película se tratara. Una proposición que busca revelar la aparente sencillez que aporta una estructura no fabricada que conocemos con el nombre de Naturaleza.

La representación del paisaje siempre me ha fascinado, seguramente porque en mi devaneo intelectual, en mi forma de ponerme frente al mundo, pienso que una de las desgracias del hombre actual reside en la continua y progresiva separación de lo natural, de no sentir la Naturaleza tomada como referente vital. Esa atracción ante el género paisajístico también reside en la lucha entre lo real y lo representado, sintiéndome capaz de hacer mío lo natural, de traducir en una mirada contemporánea algo universal e infinito: El mundo natural.'