Descripción de la Exposición ------------------------------------------------------- ------------------------------------------------------- ?Os mundos inacabados? de Joana Salvador (Lisboa, 1971), es una muestra que presenta formalmente a la artista portuguesa en España a través de su obra más reciente. El título de la misma está basado en el texto homónimo escrito por la experta Ana Ruivo en 2005, que a su vez aludía a las palabras de la propia artista cuando se refería a sus incompletos, perturbadores y acogedores paisajes, ?tan inacabados como inacabado está el mundo?. Con una frase tan contundente, pero al mismo tiempo tan incierta, marcada por el significado tan abierto que esconde, se puede definir la obra de la artista portuguesa, como un mundo propio conformado por un compendio de imágenes extraídas de su cotidianeidad transitoria, que van configurando ese peculiar hábitat creado expresamente por ella. El significado de estas imágenes deja sin cerrar del todo ese macrocosmos, condenado a permanecer inconcluso en apariencia, pero resarcido al poder ser completado por cada espectador que lo contempla. La obra de Joana Salvador tiene un fuerte carácter autorreferencial, de tal modo que las vivencias que recoge son propias, verídicas o inventadas, pero creadas y registradas en su memoria como acontecidas, siendo todas ellas muy personales y llenas de una fuerza tan especial, que le permite poder emplearlas para buscar el verdadero sentido a su vida. Joana Salvador trabaja con diversos soportes, materiales y técnicas, destacando en este proyecto sobre todo la presencia de la encáustica, lo que le aporta textura y plasticidad a la obra. Las piezas que podemos encontrar en Espacio48 son de mediano y pequeño formato, y lejos del rigor del dibujo clásico, asumen todas ellas el trazo como una traducción espontánea e inmediata. Las figuras que habitan los mundos inacabados de la pintora están controvertidamente definidas, bien rematadas, y en clara oposición con el lugar que ocupan, son personajes muy concretos, a veces toscos o desproporcionados, a veces dulces e infantiles, pero todos ellos perfectamente trabados, estudiados y ubicados en el curioso universo naif que los arropa. Y esos personajes transmiten al visitante la sensación de ser totalmente capaces de seguir modificando el espacio impreciso y tan lleno de posibilidades que les rodea, intentando siempre recordar que en este mundo no se puede dar nada por terminado...
En colaboración con la Galería 111 de Porto y Lisboa (Portugal).