Descripción de la Exposición Me gustaría poder empezar a contar de que va mi exposición en la galería SKL de una manera tan brillante como Enrique Vila-Matas empieza su libro 'Bartleby y compañía'. 'Nunca tuve suerte con las mujeres, soporto con resignación una penosa joroba, todos mis familiares más cercanos han muerto, soy un pobre solitario que trabaja en una oficina pavorosa. Por lo demás soy feliz. Hoy más que nunca porque empiezo -8 de julio 1999-este diario de notas a pie de página que comentarán un texto invisible'. Solo un párrafo para conseguir que me planteara lo absurdo que me resulta escribir este tipo de textos y de paso que me zampara su libro de una sentada. Volví a guardar el diccionario de Sinónimos y Antónimos en la estantería no sin antes jurar sobre el mismísimo códice calixtino de los artistas contemporáneos que jamás se me volvería a antojar como salvavidas para este tipo de situaciones, ni volvería a utilizar la palabra exégesis del proyecto en lugar de desarrollo o cualquier otra excusa situacionista para justificar o describir una pieza. Ya en la cama, con el texto por escribir y mientras le daba vueltas sobre como afrontar esta tarea sin faltar a mi promesa y sin resultar aburrida; con '2666' de Roberto Bolaño haciéndome señas y guiños desde la mesilla de noche 'léeme, léeme, déjate de escribir, tú pintas...' me resultó imposible no hacerle caso, pues, en definitiva, de esos temas sabe más... Descubrí que mi fascinación por la botánica y las plantas en general -que eran el hilo argumental de mi expo- era, en cierto modo, comparable a la que Hans Reiter tenía por las algas del litoral Europeo y puesto que, en definitiva, mis plantas eran especies inventadas, Bolaño podía describirlas por mi. 'A los seis años Hans Reiter era más alto que todos los niños de ocho, más alto que todos los niños de nueve y que la mitad de los niños de diez. Y, además, a los seis años había robado un libro por primera vez. El libro se llamaba 'Algunos animales y plantas del litoral europeo'. Lo escondió debajo de su cama aunque en la escuela nunca nadie echó de menos el libro. Por aquella misma época empezó a bucear. En el año 1926. Nadaba desde los cuatro años y metía la cabeza en el agua y abría los ojos y luego su madre lo reñía porque todo el día andaba con los ojos rojos y temía que la gente al verlo pensara que el niño se pasaba el día llorando. Pero bucear no supo hasta que cumplió los seis años. Metía la cabeza, se sumergía un metro y abría los ojos y miraba. Eso si. Pero bucear no. A los seis decidió que un metro era muy poco y se lanzó en picado hacia el fondo del mar. El libro algunos animales y algas del litoral europeo tenía dentro de la cabeza, como suele decirse, y mientras buceabais pasando páginas lentamente. Así descubrió a la Laminaria digitata, que es un alga de gran tamaño, compuesta por un tallo robusto y una hoja ancha, tal como decía el libro, en forma de abanico de donde salían numerosas secciones en tiras que parecían, en realidad, dedos. La laminaría digitada es un alga de mares fríos como el Báltico, el Mar del Norte y el Atlántico. Se encuentra en grandes grupos, en el nivel más bajo de la marea y bajo las costas rocosas. La marea baja suele dejar al descubierto bosques de estas algas. Cuando Hans Reiter vio por primera vez un bosque de algas se emocionó tanto que se puso a llorar debajo del agua. Esto parece difícil, que un ser humano llore mientras bucea con los ojos abiertos, pero no olvidemos que Hans tenía entonces sólo seis años y que en cierta forma era un niño singular. La Laminaria digitada es de color marrón claro y se parece a la Laminaria Hyperborea, que posee un tallo más áspero y a la Saccorhiza polyschides, que tiene un tallo con protuberancias bulbosas. Estas dos algas sin embargo, viven en las aguas profundas y aunque a veces, algunos mediodías de verano, Hans Reiter nadaba hasta alejarse de la playa o del roquerío en donde dejaba su ropa y luego se sumergía, no pudo verlas nunca sólo alucinarlas, allá en el fondo, un bosque quieto y silencioso. Por esa época comenzó a dibujar en un cuaderno rojo todo tipo de algas...'. El espacio de la galería SKL se transformará en un jardín en el que sumergirse para ver el mundo a través de los ojos de Reiter (los míos). Planteando tanto aquí como en la calle una obra mas interrogativa que afirmativa, que propone una reflexión sobre el individuo y el paisaje, me niego a explicarles una exposición o cualquier acción con un aburrido texto por que lo que precisamente reclamo con ellas es un espacio para pensar y la libre interpretación y porque firmemente creo la cita de Jean de la Bruyère.'La gloria o mérito de ciertos hombres consiste en escribir bien; el de otros consiste en no escribir'.
Exposición. 19 nov de 2024 - 02 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España
