Descripción de la Exposición ------------------------------------------------------- ------------------------------------------------------- Sin duda Pedro Castrortega es uno de los grandes pintores españoles contemporáneos. Su importancia se debe no sólo al reconocimiento y a la aceptación de su obra, sino sobre todo a la profunda originalidad y coherencia de la misma. Que su obra goza de un amplio prestigio lo demuestra el hecho de que los mejores museos y colecciones públicas españolas, como el Museo Reina Sofía, la colección BBVA o las colecciones de las comunidades autónomas de Madrid, de Valencia y de Castilla-La Mancha, tienen numerosos cuadros suyos. Pero que los mejores coleccionistas españoles tengan obra suya no demuestra sin embargo la calidad de su trabajo. Esta no procede tampoco del hecho de que sea un artista con una notable trayectoria internacional. Residente durante varios años en Berlín, su obra se encuentra igualmente representada en colecciones internacionales, como la Spaarkasse Verlag de Stuttgart, la colección Antonio Prates de Lisboa o el Museo Internacional de Arte Gráfico de El Cairo. Pero esto son tan sólo lo que podríamos denominar los aspectos externos del reconocimiento. Pero ellos no nos dan el criterio con el que podemos valorar su trabajo. Pues el éxito y el reconocimiento es pasajero y es voluble, depende de muchos azares y tiene más que ver con el mercado y la publicidad que con la verdadera dignidad creativa. De hecho tampoco el éxito es signo de calidad ni de mérito, sino tan sólo de su aceptación mercantil. La importancia de la obra de Pedro Castrortega -ya lo hemos dicho- se debe principalmente a la coherencia y la originalidad de la misma. Siendo fundamentalmente pintor, no se ha preocupado tanto de los problemas de legitimación de la pintura, que son los que en su mayor parte acosaron a toda su generación, cuanto de la construcción de un lenguaje artístico propio. Ello quiere decir no sólo que ha sido capaz, como es fácil de reconocer en su pintura, de construir un vocabulario propio, sino -lo que es tal vez más interesante- de desarrollar una problemática pictórica específica, en torno precisamente del problema de la construcción de la identidad. La identidad es, en principio, la propia identidad (¿quién soy yo?), pero es en segundo lugar la identidad común (¿quiénes somos nosotros?) y es, en tercer lugar, el problema de la identidad de la propia obra (¿qué es el arte, qué es un artista?). Con estos tres elementos Castrortega ha trenzado lo que podríamos denominar una obra filosófica: una obra que trata de elaborar pictóricamente muchos interrogantes. En esta exposición, titulada 'Un mundo feliz o tal vez no', el artista se ocupa del problema de nuestra inserción en la comunidad. Después de haber explorado reiteradamente el sentido de la propia identidad y el sentido de la propia obra, pasa ahora a ocuparse del problema del ser juntos. Del hecho de que, en realidad, nuestra propia identidad depende de nuestra propia comunidad. Así, de la convicción de que no estamos solos se pasa a la certeza del reconocimiento en el otro. De hecho, toda la serie de los grandes dibujos de esta exposición se puede casi leer como una historia. Fijémonos por ejemplo tan sólo en un dibujo. Un dibujo titulado 'Danza copular'. Me parece seductor y fascinante. Si lo vemos en relación con los otros dibujos que lo rodean, veremos claramente que se trata de una historia de amor, una historia que va desde la seducción hasta la orgía y llega al final al reconocimiento del otro. Este otro tiene la apariencia del hijo nacido del amor -como lo muestra el dibujo titulado 'Te reconozco'- pero puede referirse también al padre o a la madre, pues lo que este reconocimiento muestra en esta ocasión es que uno no sólo se identifica con su comunidad sincrónicamente, sino también diacrónicamente con aquellos que nos precedieron (nuestros padres) y aquellos que vienen después de nosotros (nuestros hijos).
Sobre papel y con un simple lápiz de grafito, pretendo atrapar universos que encubren pulsaciones, llegar a lo máximo con los mínimos recursos, esto es lo que pretendo, porque creo que sobrevaloramos la abundancia, y prestamos poca atención a lo sencillo, tenemos que valorar lo elemental porque es en muchas ocasiones donde reside lo verdaderamente intenso, y porque el viaje mas maravilloso que yo hago es el que va de mi cabeza a mi mano.
Exposición. 19 nov de 2024 - 02 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España