Descripción de la Exposición ------------------------------------------------------- ------------------------------------------------------- Con la exposición 'MARTIN CREED. Obras', comisariada por Carolina Grau, el MARCO da un paso más en la línea de proyectos individuales de producción propia, concebidos específicamente para las salas del Museo. Esta muestra supone la primera presentación individual del trabajo de este artista en España, gracias a la colaboración entre dos instituciones: el MARCO de Vigo -'MARTIN CREED. Obras' (mayo - septiembre 2011)- y la Sala Alcalá 31 de la Comunidad de Madrid -'MARTIN CREED. Cosas' (diciembre 2011 - febrero 2012). Reconocido como uno de los artistas más interesantes de su generación, y ganador del Turner Prize en 2001, Martin Creed combina su faceta de artista con su grupo de música, formado en 1994. Creed está constantemente investigando sobre la naturaleza básica de las cosas, eliminando lo accesorio en su búsqueda de lo esencial, y creando un mundo de clasificaciones, categorías y excepciones inesperadas a través de objetos, palabras y sonidos cotidianos. En su propuesta para el MARCO, Creed va un paso más allá en su análisis sobre la percepción y sobre la experiencia física, jugando con nuestra relación con el entorno. Toda la planta baja está ocupada por una de sus intervenciones, que inunda y a la vez vacía el espacio expositivo. Work No. 247 Half the air in a given space [La mitad del aire en un espacio dado], 2000, consiste en materializar la mitad del aire contenido en un espacio por medio de un objeto cotidiano. Los globos, elementos lúdicos y festivos de la infancia, se convierten en contenedores de aire, haciendo tangible y visible algo efímero e inmaterial. Creada por primera vez en 1998, esta pieza adquiere en las salas del MARCO una magnitud completamente desconocida hasta ahora, por su monumentalidad y por las dimensiones de las salas: la mitad del espacio -un total de 6.863 m3 de aire distribuidos en tres patios, tres galerías, y la rotonda central- aparece cubierto por un mar de globos de color azul celeste, que alteran por completo nuestra experiencia física y la percepción del espacio. Para poder apreciar la obra, el visitante tiene que sumergirse literalmente en ella, abriéndose paso entre los globos y desencadenando un cúmulo de sensaciones contradictorias, que van del placer a la euforia, del bienestar a la angustia, del juego a la desorientación; y donde el sentido lúdico se combina, en ocasiones, con cierto matiz amenazador. Según avanzamos en el espacio, pasamos a formar parte de la pieza, haciendo realidad las palabras del artista: 'Estás dentro de la obra en vez de estar mirándola desde fuera' [Martin Creed, revista Art World Issue 5, junio-julio 2008, p. 37]. La exposición del MARCO incluye también un grupo de obras relacionadas con la música y el sonido, en una de las salas de la primera planta: la instalación sonora Work No. 189 Thirty-nine metronomes beating time, one at every speed [Treinta y nueve metronómos marcando el tempo, cada uno a su velocidad], 1998, y partituras musicales, reflejo de la variedad en la obra de Creed, así como de su faceta de compositor, músico y autor, que considera inseparable de su trabajo como artista visual. TEXTO DE LA COMISARIA 'Work No. 247 Half the air in a given space proviene, en su origen, del mismo proceso de trabajo que Work No. 227 The lights going on and off [Las luces encendiéndose y apagándose], obra con la que Martin Creed ganó el Turner Prize en 2001, en la que las luces ya existentes de un espacio dado, se encienden y apagan de forma continuada según una secuencia temporal previamente establecida. Creed ha descrito esta pieza como un intento de hacer una escultura similar a una pieza de música, en la que 'la obra sucede delante de ti mientras la estás observando' [Martin Creed, entrevista Tom Eccles, Martin Creed. Works, 2010, p. XV]. Mostrar el proceso de la obra es algo sobre lo que Creed lleva investigando desde el inicio de su carrera artística. Al finalizar sus estudios de arte en la Slade School of Art, empezó a componer música y canciones, como un modo de hacer el proceso más visible: 'Una canción es un proceso, desde el momento anterior al inicio de la música hasta el momento inmediatamente posterior a su finalización' [Martin Creed, entrevista Jérôme Sans, 'Blow and Suck', Live, Palais de Tokyo / Éditions Cercle d'Art, 2004, p.76] Desde entonces, música y sonido forman parte integrante de la obra de Creed, pero existen diferencias entre ellas. Las obras de sonido tienen una estructura abierta, sin principio ni fin. La exposición del MARCO incluye la instalación sonora Work No. 189 Thirty-nine metronomes beating time, one at every speed, en la que 39 metrónomos funcionan a la vez, marcando un tempo -la velocidad a la que una pieza musical debe ejecutarse- pero cada uno a distinta velocidad, de entre las 39 posibles. El metrónomo, un instrumento de precisión, pasa a reproducir todas sus velocidades, creando una cacofonía que se percibe en paralelo a la acción de esos 39 objetos, alineados como si fuesen bailarinas, y moviendo sus brazos a distintos ritmos. En palabras del crítico Massimiliano Gioni, el metrónomo funciona como metáfora esencial de la obra de Creed: 'sonido, negación de sonido, repetición de sonido. Sonido, silencio, sonido, silencio...' [Massimiliano Gioni, 'The System of Objects', en Martin Creed. Works, 2010, p. XX]. Una de las características de las obras de Creed es que se pueden ejecutar infinita y repetitivamente como una partitura de música, pero al igual que esta, cada interpretación es distinta de las anteriores. Muchas de sus obras están basadas en instrucciones precisas del artista, como en Work No. 117. All the sounds on a drum machine [Todos los sonidos de una batería eléctrica], 1995, o Work No. 194. Nothing [Nada], 1995-1996, una canción en la que solo se repite esa misma palabra. La exposición del MARCO incluye, en una de las salas de la primera planta, varias piezas y documentación que abarcan sus diversas exploraciones en obras de sonido, canciones y partituras musicales; como reflejo de la variedad de su obra, de su faceta de músico y autor. Paralelamente a su carrera artística, Creed creó su grupo de música en 1994, formado originalmente por tres instrumentos, que interpreta canciones reducidas al mínimo de palabras y notas. Todas sus composiciones musicales tienen una estructura cerrada, un principio y un fin, y van desde Creed enumerando los números del 101 al 200 en Work No. 196 101-200, 1994-1995, a versiones más líricas como Work No. 191 Feeling blue, 1994-1996, en la que identifica colores con estados de ánimo. En los últimos años, las actuaciones en vivo de 'Martin Creed & his band' han ido evolucionando hacia Variety Performances, donde entrelaza diversos medios y lenguajes -orquesta, danza, videoarte, charlas, ballets, mímica- difuminando la línea divisoria entre música y arte, entre distintos géneros, y experimentando con ellos en espacios como teatros, auditorios, museos, clubes o universidades. 'I also like music because it's in the air, everywhere... it's all around - it doesn't have to stay in one place' [Me gusta la música porque está en el aire, en todas partes... por todos lados, y no en un lugar en concreto. Martin Creed, entrevista Tom Eccles, Martin Creed. Works, 2010, p. XIII]'. Carolina Grau Comisaria de la exposición
El artista británico Martin Creed (Wakefield, Reino Unido, 1968) presenta un proyecto que se enmarca en el formato de nuevas producciones realizadas específicamente para el MARCO. Reconocido como uno de los artistas más interesantes de su generación, y ganador del Turner Prize en 2001, combina su faceta de artista plástico con su banda de música, formada en 1994. Creed está constantemente investigando sobre la naturaleza básica de las cosas, creando un mundo de clasificaciones, categorías y excepciones inesperadas a través de objetos, palabras y sonidos cotidianos. En su propuesta para el MARCO, que supone la primera exposición individual de su trabajo en España, Creed va un paso más allá en la investigación sobre la percepción y sobre la experiencia física, jugando con nuestra relación con el entorno. Toda la planta baja está ocupada por una de sus intervenciones, que inunda y a la vez vacía el espacio expositivo. La exposición se completa con un conjunto de obras relacionadas con la música y el sonido, en una de las salas de la primera planta.
Exposición. 19 nov de 2024 - 02 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España