Descripción de la Exposición En el ámbito fotográfico, la diferencia sustancial entre el blanco y negro y el color, no sólo es por la gama cromática mencionada, sino que la combinación de sólo dos colores, permite un juego de luces y sombras, único que el color no acentúa en la misma proporción. Chema Madoz es plenamente consciente del aplomo y de la atracción del blanco y negro, y presenta un conjunto de obras, donde un solo concepto llena el encuadre, versificando los componentes a los sones de una particular lira: la cámara fotográfica. A pesar de lo inanimado de los objetos, el artista los presenta con solemne majestuosidad, de impresionante presencia, vacios de bagajes pero llenos de contenido. Metáfora poética de susurros vitales. Sorprendentes montajes, estéticamente realizados con precisión y perfeccionismo, que evocan la exquisitez de un 'gigante' bonsái, con la austeridad de un reloj de péndulo, marcando inalterablemente las horas. Algunas fotografías son objetos cotidianos, pero que a través de Madoz resultan extrañamente metafísicos: Un vaso transparente conteniendo el movimiento del agua, un punzante zapato de mujer, de exagerado tacón de aguja, o un particular cuello de camisa, plagado de notas musicales, configuran un universo fotográfico de lánguidos elementos. En contraste, la elegancia de un piano de cola, la sencillez de un banco del parque... plagado también de las notas de un pentagrama, un cajón abierto de una mesa o el aplomo de un gong ofrecen una visón grandilocuente, tanto por su formato, como por el objetivo, la luz y en encuadre empleados. Precisión y técnica depurada para una obra de extraña belleza, singular simbología, retando al espectador a descubrir el enigma, la afinidad, la parábola o la paradoja.
Exposición. 19 nov de 2024 - 02 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España